Global Courant
El crimen de Gabriela Pérez, la joven asesinada a tiros el sábado mientras se desarrollaba un acto del Sindicato de Obreros y Empleados de Empresas de Limpieza, Servicios y Afines de Córdoba (Soelsac), continúa en su etapa de investigación y la Justicia sospecha que se trató de una interna sindical. En las últimas horas se conocieron imágenes del momento en que una persona dispara contra la multitud sin mediar palabra.
El hecho ocurrió pasadas las 14 del pasado sábado en el Club Yapeyú, de la ciudad de Córdoba, cuando el titular del Soelsac, Sergio Fittipaldi, encabezaba un acto de campaña en el marco de las elecciones internas del próximo jueves para renovar autoridades de ese gremio.
En ese contexto, un hombre se acercó al lugar y efectuó varios disparos que, según la investigación preliminar que lleva adelante la fiscal Silvana Fernández, correspondían a un arma calibre 9 milímetros, uno de los cuales atravesó una de las aberturas del local e impactó en la clavícula de Gabriela Mónica Stefi Pérez (24).
La mujer, empleada de servicios de limpieza y mamá de una nena de cinco años, cayó herida al piso, fue auxiliada por un compañero y trasladada hacia el Hospital Córdoba, donde murió mientras era asistida en sala de terapia intensiva.
Una cámara de seguridad del exterior registró al agresor. Estaba vestido con un buzo azul y chaleco negro y tenía su rostro cubierto: usaba barbijo y gorra. Así, cuando el reloj marcaba las 14.39, se acercó caminando hacia un auto que estaba estacionado frente a la puerta de ingreso al club. Delante del vehículo se agachó un instante y al ponerse de pie, abrió fuego.
En medio de la desesperación y la confusión, hubo corridas en busca de refugio y algunos se asomaron a la calle para ver qué sucedía. En esas circunstancias, Gabriela cayó herida grave debajo de una mesa.
El homicida escapó corriendo y dobló por la calle Germania, hasta donde llegaron a grabar las cámaras de la institución. Hasta este martes, el autor del ataque sigue sin ser atrapado.
La fiscal Fernández, en su línea investigativa, solicitó una serie de medidas procesales para tratar de identificar a los responsables de los disparos y, a la vez, determinar si el ataque está vinculado a un conflicto entre ambos gremios por la pertenencia de sus afiliados, ya que un sector del Surrbac tiene representantes para competir por la conducción del Soelsac.
En tanto, esta mañana, el abogado Carlos Nayi se presentó como el representante legal de los familiares de la víctima y aseveró ante los medios locales que “claramente se trata de un hecho criminal de tinte mafioso, con la idea de instalar el miedo, la posición de dominio, y marcar territorio, que es la cara visible del sicariato”.
Al respecto, dijo que solicitó a la fiscal Fernández que se identifique a los que atacaron a la joven y a los responsables intelectuales, al sostener que “son todos responsables y deben ser alcanzados por la mano de la justicia”.
aDalma, hermana de Gabriela, manifestó esta mañana a canal 12 de Córdoba que también estuvo participando de la actividad política: “Sentí los balazos y comencé a correr. Tenía a mi bebé de dos meses en brazos. Busco a mi hermana y la veo ensangrentada tirada en el piso”.
Dijo también que, por el temor a las balas, “todos habían desaparecido”. Un compañero me ayudó y la llevaron al hospital”, relató.
Asimismo afirmó que “los balazos no sólo eran desde afuera, también había cruce de balas adentro (del local)”.
Otra hermana de la víctima, Gisella, dijo que estaban en el acto porque el gremio la “obliga a participar” de los actos políticos, caso contrario “no firman los contratos” de servicios de limpieza que ellas realizan.
“Quiero justicia. Quiero que se esclarezca y se condene a los culpables”, pidió la hermana de Gabriela, quien fue velada y sepultada en la jornada de ayer.
Con información de Télam